Década de los 90
Amilanarse no era opción para Suárez, pese a las limitadas oportunidades que el stablishment y el mercado artístico le presentaba.
Gracias a su extenso catálogo empírico de conocimientos sobre
materiales y técnicas logra sostener económicamente a su familia y a su propia
investigación plástica con la realización de las obras de otros artistas, así
como con la restauración y conservación de piezas, tanto para colecciones
públicas como privadas.
En cuanto a su obra plástica, en ésta década desarrolla una evolución hacia la tridimensionalidad, primero con sus "Relieves" serie de obras que se caracterizan de las anteriores por el uso del hierro como material para la realización total de las obras. También abandona parcialmente el acrílico, complementando su uso con óxidos para pigmentar sus piezas. La arena también es sustituida para crear las texturas del soporte por polvo de mármol y de otros minerales. Aparecen los capilares o filamentos hechos en cabilla y los surcos y cortes en el soporte juegan el rol que antes tenían las transparencias. Las esferas se imponen al círculo contorneado. En definitiva es una evolución que abrirá el paso a las esculturas.

"Amazonas", de Daniel Suárez, realizada en 1990 muestra los elementos de hierro que marcan su despegue hacia la escultura, en este caso se desprenden del soporte y vuelven a éste (elementos rojos de centro y derecha) o salen de la superficie como afloramientos que se separan para tomar altura (izquierda). Archivo personal.
"Abertura en Guayana", obra de Daniel Suárez de la serie "Relieves" en la que aun coexisten elementos del informalismo con propuestas que desarrollará en los siguientes años, como el uso hegemónico del hierro ya presente en este soporte y sus elementos tridimensionales. Archivo personal.